

Santa Fe 2023
56º Latitud Sur - de Castilla a Tierra del Fuego
Theatrum Orbis Terrarum
El Cuarto y Quinto Mundo
América aparece en la toponimia mundial por primera vez en 1507. El cartógrafo alemán Waldseemüller nombra “América” a América del Sur que se extiende hacia el polo antártico. El planisferio viene acompañado de la cosmografía y los relatos de Américo Vespucio que navegó hacia regiones australes nunca exploradas hasta entonces.
Hasta finales del cuatrocientos todos convenían en que el hemisferio sur era tierra continental e inabitable. Por experiencia, los navegantes del norte y los comerciantes sabían que las temperaturas y el clima cambiaban radicalmente más allá de las costas de África mediterránea oscureciendo la piel de sus habitantes por efecto del sol. Las transacciones con regiones del sur se relacionaban con los mares del sur de China, que sólo se conocía través de fantasiosos relatos que nutren los libros de historia.
En poco tiempo iban a descubrir con asombro que lo que denominaban mundo conocido, Europa, África y Asia ocupaba realmente una cuarta parte de la esfera terrestre. Durante la era de los “descubrimientos” Europa iba a descubrir tres cuartas partes de la esfera para colonizar. El globo terrestre estaba bien medido desde antes de Cristo, lo que no estaba calculado y nadie podía imaginar era la extensión de la superfie oceánica en relación a las masas continentales ni el enorme dispensadero de recursos naturales y humanos por explotar.
En los albores del siglo XVI los libros de cosmografía, atlas y globos terráqueos se apresuran a corregir la vieja ecúmene tripartita con la puesta en escena de América en el "Teatro del Mundo "el nombre feminizado de Américo Vespucio que se convierte así en la cuarta diosa que irrumpe en las alegorías de los continentes. En el frontispicio del Theatrum Orbis Terraum publicado por el editor Abraham Ortelius [Amsterdam, 1570] anuncia el naciento de una quinta diosa, la diosa Magallánica, para nombrar Terra Australis cuya existencia ha sido avalada por el viaje de Magalleanes/Elcano. Conscientes de que es todavía un quinto mundo por descubrir, la imagen recrea el busto de Magallánica posada sobre un plinto donde una llama pintada evoca la Tierra del Fuego
Cuando Australia fue Terra Australis
Sin embargo, Tierra del Fuego deja de ser un continente y se transforma en archipiélago y la Antártica, tal como hoy la comocemos, se descubrió oficialmente en 1820. En el siglo XVIII se había descartado la existencia de otro continente en el polo antártico y se había establecido Australia como el quinto continente. Pero nunca hubo una diosa que la representara. Para esas fechas las alegorias de los continentes habían pasado de moda.
Durante décadas Terra Australis pasó a llamarse Australia. Su primer nombre, Nueva Holanda, se aplicó por primera vez a la costa occidental y norte de Australia en 1644 por el navegante neerlandés Abel Tasman, mejor conocido por su descubrimiento de Tasmania. El capitán inglés Matthew Flinders dirigió a principios del siglo XIX la primera circunnavegación de Australia y fue quien popularizó el nombre de “Australia” en honor a Terra Australis, argumentando que no había ninguna probabilidad de encontrar otra masa de tierra significativa en latitudes más autrales. A pesar que el libro de Flinders publicado en 1814 sobre su viaje lo tituló A Voyage to Terra Australis, se le atribuye ser la primera persona en utilizar el nombre “Australia” porque la consideró "más agradable al oído" que nombres como Terra Australis.